Los espacios corporativos, que cada vez tienen mayor demanda de los inversores, deben reunir una serie de características que mejoren el entorno laboral y optimicen las operaciones.
ARQUITECTURA
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Ubicado en una esquina emblemática del casco antiguo, este complejo de viviendas y oficinas propone volver a conectar con las virtudes que ofrece el corazón de la ciudad.
Los edificios en esquinas son muy valorados en el mercado inmobiliario. Este, en particular, ubicado en la intersección de las calles Estrella y O’Leary, destaca por su imponente diseño. Además, está considerado uno de los más altos del centro histórico de Asunción y es dueño de las mejores vistas a la bahía de la ciudad.
El Astra, hoy, es un núcleo residencial y corporativo, pero, hace más de una década atrás, la obra que se comenzaba a levantar en esta esquina tenía otra intención. “La idea original de esta estructura era un hotel”, revela Sara Lys, arquitecta de la obra en ese momento. Junto a su familia, propietaria de la empresa que desarrollaba el proyecto, buscaban expandir la experiencia que hace tiempo venían ofreciendo en otro hotel de la zona, el Sabe Center. “Lo pensamos como una versión mejorada, con más amenities y medidas más acertadas en relación al equipamiento, etc.”, comenta.
Sin embargo, en plena proyección, decidieron parar la obra debido a las tendencias que atravesaban al rubro hotelero en esa época. “Hubo un cambio en la manera de hacer reservas: aparecieron las plataformas digitales, que permitían a todo el mundo levantar un dormitorio, una casa, una pensión o cualquier tipo de inmueble como hospedaje”, recuerda.
Ante este nuevo escenario, y buscando proteger lo invertido, la familia decidió poner un freno al proyecto. “No podíamos abrir un nuevo hotel cuando el que contábamos, experimentaba baja ocupación. Tuvimos que bajar tarifas y entrar a competir con un montón de casas y departamentos”, recuerda sobre el impacto de los cambios.
Así fue como la construcción del nuevo hotel, que ya había alcanzado importantes avances, quedó en pausa por muchos años. Transformado en un edificio residencial y corporativo, un nuevo capítulo empieza a escribirse para esta obra del centro de Asunción.
Unir piezas: Astra Home y Astra Corporate
Fiel a los trazos de su autora inicial, Sara Lys, el nuevo Astra mantuvo su envergadura en esta nueva etapa. A su monumental silueta, se sumó la mirada del ingeniero Carlos Latorre y equipo, quienes materializaron el diseño actual a partir de dos propósitos principales: establecer un área corporativa y desplegar un área residencial en altura.
“Hay habitaciones que, como estaban diseñadas para un hotel, permanecen como tal, y hay otras que se transformaron o ampliaron para unir dos dormitorios o integrar, por ejemplo, el living con la cocina; y así, darle una conexión. Es decir, se organizó el departamento, pero siempre respetando la estructura previa”, destaca la arquitecta. “Es un producto muy bien logrado, tiene gracia, funcionalidad y medidas cómodas que hacen que habitar sea una experiencia agradable”, agrega.
En ese sentido, el diseño habla por sí solo. “Todos los ambientes miran al exterior. No existen departamentos internos, ni habitaciones que no tengan vistas. Esta característica fue priorizada, ya que al estar ubicado en una esquina tenés la posibilidad de ver la ciudad. Los departamentos que están sobre la calle Estrella tienen una vista fabulosa a la bahía de Asunción”, detalla Lys.
Astra Home comprende el área residencial del proyecto, desarrollada en los pisos más altos del edificio para ofrecer a los residentes privacidad, seguridad y calidad de vida. Se compone de departamentos de uno y dos dormitorios que destacan por sus espacios amplios, iluminación natural, cielo raso y balcones que regalan la sensación de estar flotando en el aire.
Los pisos inferiores corresponden a Astra Corporate, donde se despliegan oficinas de entre 60 y 380 m² con ambientes modernos, amplios y modulables, que garantizan una experiencia administrativa ágil y expansiva, en sintonía con el movimiento corporativo del centro de Asunción.
Ambos cuentan con un lobby independiente y ascensores exclusivos. Asimismo, el edificio brinda una solución al problema de estacionamiento de vehículos poniendo a disposición cuatro subsuelos de cocheras. Y más importante aún, ofrece amenities ideales para concentrar la rutina del día en un solo lugar: gimnasio, piscina, quincho, sauna, salones para eventos, entre otros.
“Creo que el hecho de que haya gente habitando el Astra, le va a dar vida al centro. La gente que viva aquí encontrará en el centro todo lo que necesita, desde supermercados hasta negocios de todo tipo. Este edificio es una apuesta, un testimonio vivo de que es posible creer en proyectos así. Además, ayudará a que otras viviendas o inmuebles se renueven, busquen hacer mejoras o habiliten su alquiler. En definitiva, va a revalorizar la zona”, concluye.
Sobre Sara Lys
De profesión, arquitecta. Apasionada del diseño, dibuja casas en sus momentos de mayor inspiración. Descubrió esta veta creativa siendo niña, cuando pedía a su madre cambiar los muebles del hogar de un rincón a otro. Su familia siempre la apoyó en su elección, y la impulsó a formarse y desarrollarse en la materia. Su primera obra, por encomienda de su padre, fueron dos salones comerciales con un departamento en planta alta.
Tras esta experiencia, asumió el desafío más importante de su carrera: la construcción del Sabe Center, el hotel de su familia. “Es como si hubiese hecho diez carreras de arquitectura, me sirvió para todo lo que hago. Estar desde los cimientos hasta que se colocó el último sillón, me dio mucha experiencia”, comenta. En esta obra trabajó con Roberto Vera Vierci, a quien considera su gran maestro, y quien la acompañó nuevamente en la proyección de la estructura del Astra, en su primera etapa.
Su presente laboral gira en torno a su profesión madre, ya que se encarga de la gestión administrativa del hotel familiar, es propietaria de una empresa que comercializa aberturas y puertas, y está involucrada en el sector inmobiliario desde el desarrollo, la construcción y alquiler de propiedades.
Como autora de su propia residencia, define con facilidad su forma de ver y hacer arquitectura: “Todo lo que hago lo hago como si yo fuese a vivir o trabajar ahí’. Mi casa es mi lugar en el mundo, me di el gusto e hice la casa que quería habitar”, revela.
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